jueves, 12 de abril de 2018

OBIANG PREPARA LA SUCESION EN SU HIJO TEODORÍN, EN SECRETO Y A ESPALDAS DEL EJERCITO Y DEL RESTO DE ESTAMENTOS DEL ESTADO



Oposición guineana en el exilio español, 12 deAbril de 2018.- A nuestra redacción ha llegado una noticia escalofriante, pero no por ello, con menos verosimilitud: Obiang Nguema está intentando burlarse de los países occidentales y de su propio pueblo, que le han manifestado que no están dispuestos a que su hijo tonto y disoluto Teodorín,  herede la jefatura del estado. Para ello está urdiendo un siniestro plan, que consiste en ir desarmando a nuestro ejército -desde hace tiempo sabemos que los militares no llevan balas reales- e introduciendo a sus allegados, muchos de ellos gaboneses, como cargos de confianza en el ejercito de Guinea Ecuatorial. Por otra parte, está armando a diferentes grupos de musulmanes, afincados en Guinea Ecuatorial y de otros países, para que, junto con los mercenarios congoleños y ugandeses, se vayan haciendo con el monopolio de la violencia, marginando así a los militares guineanos que no gozan de la confianza de Obiang.

Nos informan que Obiang y su hijo están llevando a cabo diferentes encuentros y reuniones con chinos y rusos para dejar sentado a Teodorín en el sillón presidencial por la vía de los hechos consumados y cuando menos nos lo esperemos. Los generales chinos, que ya se encuentran sobre el terreno, aportarán junto con sus empresas, el apoyo logístico necesario. Por otra parte, los rusos pondrán  un batallón -unos mil efectivos- con el objetivo de disuadir cualquier presión occidental. 

Parece ser que Obiang está dispuesto a gastar el dinero que sea necesario, con el que financiará a los diferentes jefes de los grupos musulmanes, así como los demás elementos intervendrán en la operación. Sabemos también, que esta plan estará apoyado por  Camerúm y tolerada por Gabón, país del que procede el mismo dictador.

Está claro que Obiang, experto en el despiste y en la intoxicación, gastará  todos sus cartuchos para intentar que su sucesión quede en la familia, o en  todo caso, en alguno de los allegados al poder del distrito de Mongomo. El objetivo es evitar una condena por parte del Tribunal de Justicia Internacional y ocultar con el manto de la impunidad, los robos, las violaciones y los asesinatos, que tanto la familia Obiang, como todos los gerifaltes han estado cometiendo.